
- La aplicación FashionChecker permite rastrear el compromiso de las marcas de ropa y calzado a lo largo de la cadena de valor
- Ofrece información completa sobre el cumplimiento de derechos sociales y derechos humanos en las fábricas de producción
- Este tipo de aplicaciones permite tomar conciencia al consumidor sobre la responsabilidad social de los productos que compra
15 de febrero de 2021
El 93% de las marcas estudiadas por Clean Clothes Campaign no paga sus trabajadores de la confección salarios dignos de ahí que la mayoría de los trabajadores de la confección no pueden cubrir las necesidades básicas de la vida. La remuneración justa por el trabajo es un derecho humano fundamental, pero ninguna de las marcas de moda más importantes paga a los trabajadores de la confección un salario del que puedan vivir.
Junto a ello, el 80% de los trabajadores de la confección son mujeres. Normalmente se les paga menos que a sus homólogos masculinos. La desigualdad de género está profundamente arraigada en el desequilibrio de poder de la industria, y la remuneración por género tiene un vínculo directo con la agresión verbal, física y sexual.
Las marcas se han beneficiado de los salarios de pobreza durante décadas, dejando a los trabajadores de la confección sin seguridad en tiempos de incertidumbre. La crisis de COVID-19 mostró la desigualdad social y económica de la industria, que afectó particularmente a los millones de personas encerradas en trabajos sin protección legal.
La aplicación FashionChecker es una campaña de Clean Clothes Campaign financiada por la Unión Europea que explora la cadena de suministro de marcas de ropa y calzado y analiza su transparencia, el grado de coherencia entre sus compromisos y los hechos y ofrece información detallada sobre el pago de salarios dignos a sus trabajadores.
Por ejemplo en la búsqueda «Zara» la app nos devuelve esta información:
Y explora la información en toda la cadena de suministro, ofreciendo datos sobre número de trabajadores, desglose por género o igualdad salarial por países donde se localizan las fábricas.