
La Comisión Independiente para la Reforma de la Fiscalidad Corporativa Internacional, ICRICT, fue fundada por una amplia coalición de la sociedad civil y organizaciones de trabajadores, entre las que se incluyen ActionAid, Alliance Sud, CCFD-Terre Solidaire, Christian Aid, el Consejo Global Unions, la Alianza Mundial por la Justicia Fiscal, Oxfam, la Internacional de Servicios Públicos, la Red de Justicia Fiscal y el Consejo Mundial de Iglesias.
Su objetivo, promover el debate sobre la reforma del impuesto a las sociedades a nivel internacional mediante una discusión lo más amplia e incluyente posible de las normas fiscales internacionales; considerar las reformas desde la perspectiva del interés público mundial en vez del nacional; y buscar unas soluciones fiscales justas, eficaces y sostenibles para el desarrollo.
Convencidos de que el actual sistema de tributación de los beneficios globales de las corporaciones multinacionales no funciona y que las normas e instituciones que gobiernan el sistema tributario internacional deben cambiar, la Comisión, presidida por José Antonio Ocampo, publicó ayer una declaración donde ha establecido una serie de principios y recomendaciones de reforma. Redactada en un lenguaje claro y asequible, este documento constituye una hoja de ruta ineludible para gobiernos y multinacionales en la reforma del sistema tributario corporativo.
Los principios de la Declaración son los siguientes:
1. Las tácticas abusivas en el ámbito tributario por parte de las corporaciones multinacionales aumenta la presión tributaria sobre el resto de los contribuyentes, vulnera las obligaciones cívicas de las corporaciones, roba a países desarrollados y en desarrollo recursos críticos para luchar contra la pobreza y para financiar los servicios públicos, exacerba la desigualdad de ingresos y aumenta la dependencia de los países en desarrollo de la asistencia oficial.
2. Las prácticas tributarias abusivas de las corporaciones multinacionales constituyen una forma de corrupción que debilita la sociedad y requiere medidas urgentes. Esto es cierto incluso cuando las prácticas de las corporaciones se atienen a la legalidad y, especialmente, cuando las corporaciones utilizan su influencia política para lograr que se introduzcan leyes tributarias que les dan margen para cometer dichos abusos.
3. Las corporaciones multinacionales actúan —y por lo tanto deberían tributar— como una sola entidad que hace negocios a escala internacional. Esta es la clave de toda reforma en este campo, porque las multinacionales suelen estructurar los precios de transferencia y otros acuerdos financieros para trasladar los beneficios que generan a empresas pantalla radicadas en las jurisdicciones con baja tributación.
4. Los paraísos fiscales facilitan las maniobras tributarias abusivas que generan enormes perjuicios para la comunidad mundial.
5. Los primeros pasos básicos para frenar los abusos tributarios deben ser exigir una mayor transparencia y acceso a la información.
6. Dado que cada persona y cada país sufre los efectos de las tácticas tributarias abusivas de las corporaciones, debería ampliarse el debate sobre la elusión tributaria de las multinacionales y hacerlo más accesible al público.
7. La cooperación internacional incluyente en materia tributaria resulta esencial para combatir los retos que plantean las prácticas tributarias abusivas de las multinacionales.
En cuanto a las recomendaciones,
1. Las multinacionales deben tributar como una entidad única
2. Hay que frenar la competencia tributaria.
3. Asegurar el cumplimiento de las normas imponiendo sanciones penales
4. Aumentar la transparencia.
5. Reformar los convenios tributarios.
6. Desarrollar un sistema de cooperación tributaria internacional más incluyente
Puedes leer la declaración completa en nuestra sección de informes.
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